que ojalá volviera a verte
cada invierno de mi vida
y vieras que contigo nunca tuve prisa
porque conocerte es viajar y besar
dulce y lento
un día de invierno
llenas de frío por fuera
y de amor por dentro.
Y que ojalá sonrías
al leerme, al leer esto.
Colometa,
tú cambias vidas,
pero no destinos.
y créeme, no es mi objetivo
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