Inesperadamente, te encontré callejeando,
así,
te encontré sin buscarte.
Entonces decidimos partir a dejar huella en los anaqueles de aquel parque lleno de poetas.
Lleno de vida escrita.
Nuestras palabras impregnadas en libros que otros abrirán y tal vez con un poco de suerte, leerán.
Me pregunto qué escribiste en el tuyo,
me pregunto si te volveré a encontrar.